domingo, 17 de enero de 2010

LA DESESPERACIÓN DESBORDA A HAITÍ

PUERTO PRÍNCIPE.- El caos reinaba en Haití con el principal aeropuerto congestionado, lo que dificultaba la llegada de asistencia humanitaria, mientras haitianos desesperados cortaban rutas con barricadas de cadáveres, a cuatro días del devastador sismo de siete grados de magnitud que provocó un número aún incalculable de muertos. Los disparos al aire de la Policía ahuyentaban solo unos minutos al grupo de haitianos que intentaban entrar en una tienda de ropa del centro de Puerto Príncipe, que días después del sismo convirtió a sus ciudadanos en ladrones debido al hambre y al abandono, reportó AFP. "Roban cualquier cosa. Sirva o no. Es una locura. Nuestra orden es solo alejarlos. No podemos dispararles. Nuestro trabajo no sirve de nada pero no estamos protegidos y tenemos miedo", afirmaba Louis Jean Eficien, oficial de la Policía, mientras confiscaba un extintor de fuego a un grupo de personas. Una réplica de 4,5 grados, según el Instituto Geológico de Estados Unidos, volvió a sacudir ayer la nación caribeña y a sembrar el pánico en la capital, lo que obligó a paralizar temporalmente las tareas de rescate de víctimas del terremoto La envergadura del desastre ha llevado al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a decir que el terremoto de Haití ha originado "una de las mayores operaciones de socorro" de la historia de Estados Unidos. Para Naciones Unidas también se trata de un hecho inédito: "nunca estuvimos confrontados a un desastre de esta magnitud en los anales de la ONU. No se parece a ningún otro, pues el país fue decapitado", dijo, desde Ginebra, Elisabeth Byrs, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios.


Chávez cree que es "imposible" evitar errores en el gobierno

Caracas.- El presidente Hugo Chávez, durante una entrevista sostenida con el periodista José Vicente Rangel, dijo que resulta "imposible" que el gobierno pueda evitar errores. La afirmación la hizo en un contexto en el que se refería a la crisis energética nacional. "Es imposible (no equivocarse), trataremos de no equivocarnos pero imagínate nadie podría honestamente asegurarlo, siempre existe la posibilidad de errores de diagnóstico, a veces no en el plan sino en la aplicación del plan", detalló. No obstante, exaltó como una virtud la capacidad de rectificación gubernamental. "Lo que sí digo es que no me da ni pena, ni saco cálculos políticos a la hora de rectificar". Por eso es que según relató, no dudó al revertir el plan de racionamiento en la capital nacional al ver que se habían cometido errores en su aplicación. "Es tener la capacidad de reconocer a tiempo los errores de oír, de reconocer las verdades y rectificar a tiempo", acotó. "Un país como el nuestro debe tener tranquilidad al saber que un gobierno rápidamente- la medida no duró ni 24 horas- no tener ningún empache en cambiar", consideró el mandatario nacional. Considera que las críticas opositoras sobre que la responsabilidad en su total es del gobierno y nada tiene que ver el fenómeno El Niño es parte de la apuesta de este sector a que el país se sumerja en el caos. "Hay una realidad objetiva que hay que mirarla, te voy a decir lo que quieren la mayor parte de los que nos atacan diciendo que es falta de previsión e inversión, ellos lo que quieren es que aquí ocurra un colapso eléctrico pero nosotros estamos aquí para impedirlo".

Explicó una vez más las razones de la crisis. "Hay que recordar que hace 11 años había un plan para hacer 4 embalses más en el alto Caroní y nos convencimos que eso era una locura, Venezuela ha dependido por más de medio siglo de ese río y nosotros comenzamos un plan (…) después de recuperar Pdvsa iniciamos ahora sí la construcción de las termoeléctricas para utilizar el gas, de manera que hemos venido invirtiendo". "El fenómeno El Niño está y hay que racionar para impedir el colapso general es obligante la dieta eléctrica, ahora que hay que hacerlo bien, correcto, para los que dicen que yo soy un tirano, un dictador, quizás le pudiera servir lo que ocurrió el miércoles pasado cuando me di cuenta que en realidad se estaba afectando a sectores que no se debían afectar, que había errores en el plan de racionamiento de Caracas (…) en realidad el plan estuvo mal elaborado".

Cuestión de ritmo

El mandatario nacional dijo que en el caso de la devaluación sí no hay errores, que era a todas luces una medida necesaria y que si en una oportunidad se habló de no devaluar y ahora sí se toma la decisión es "cuestión de ritmo y de evaluaciones". "El ajuste cambiario como cualquier observador y analista objetivo puede concluir no se ha hecho porque aquí haya hecho una caída fiscal, porque a pesar de la caída vertiginosa de los precios del petróleo hicimos un buen manejo administrativo de 2009 y terminamos el año bien, no hicimos ninguna carrera para pagar aguinaldos y compromisos de la República", explicó.

Agregó que la devaluación tampoco se hizo para pagar deuda interna o externa sino para "ponerle freno a la avalancha importadora". "En los últimos años muchos empresarios con el dólar barato se fueron por la vía de las importaciones y abandonaron la producción interna, con esta medida lanzamos la señal de que queremos sustituir importaciones y queremos promocionar las exportaciones, esa es la razón fundamental", insistió.

Negó que la medida de devaluación tenga un signo electoral, es decir, aumentar el flujo de dinero porque este año hay elecciones parlamentarias. "En realidad no, absolutamente para nada, (pudiera ser más bien) lo contrario hay sectores que la decisión lleva un costo político y fue tomada en un momento inapropiado porque estamos en año electoral pero nosotros no consideramos para nada el tiempo electoral sino los proyectos económicos y sociales". Dijo que el único riesgo ante el establecimiento del nuevo tipo de control de cambio es la inflación. "La inflación es permanente y se incrementa por la especulación como hemos visto en los últimos días y por esos códigos de nuestra sociedad orientada por el consumismo por eso le digo al pueblo que no se deje atemorizar, que nos salgan disparados a comprar neveras y televisores, no hay necesidad (…) nosotros vamos a combatir la especulación".

El aumento del salario se queda corto ante el alza de los precios

El alza de 26,5% sólo estará en el bolsillo durante los últimos cuatro meses del año. Después de devaluar la moneda e introducir en el escenario una variable que inyecta combustible al alza de los precios, el Gobierno ha anunciado un incremento del salario mínimo que no permite mayor optimismo a los trabajadores. El ajuste contempla cero aumento durante los dos primeros meses del año. Entre el primero de marzo y septiembre, los trabajadores tendrán un alza de 10% y durante los últimos cuatro meses del año tendrán otro incremento de 15%. De esta forma, el salario mínimo experimentará un aumento en el año de 26,5% que lo elevará desde 967,5 bolívares hasta 1.223,89 bolívares, pero que sólo estarán disponibles del todo durante los últimos cuatro meses de 2010. El resultado es que en promedio, el incremento del año es de 16,6%, una magnitud que luce enana ante los pronósticos de inflación.


La devaluación de la moneda se traduce en que los bienes básicos, que incluyen alimentos y medicinas, se importan de ahora en adelante con un tipo de cambio de 2,6 bolívares por dólar, es decir, un incremento de 21% respecto al antiguo 2,15. Esta semana el sector de la agroindustria solicitó al Gobierno un aumento de los precios de la leche en polvo, pasteurizada, quesos, aceites y grasas argumentando el alza de estos productos en el mercado internacional y la devaluación del bolívar. Un reporte del Royal Bank of Scotland, elaborado por el analista Boris Segura, afirma que este año la inflación en Venezuela, tomando en cuenta el impacto de la devaluación, estará en el orden de 40%. Organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional y firmas privadas como Ecoanalítica, proyectan una inflación entre 35% y 40% que podría pulverizar el incremento salarial.

La merma del poder de compra no será una novedad. En 2009 el salario cedió ante el incremento de precios y el consumo de las familias se contrajo 2,6%, de acuerdo con las estadísticas del Banco Central.

El BCV reconoce que la contracción en el "consumo final privado obedece principalmente a la caída del ingreso real, el aumento del desempleo y la menor disposición al gasto de los hogares". En términos generales la inflación de 2009 se ubicó en 25,1%, experimentando un descenso respecto a 31,9% de 2008, no obstante, al observar en detalle el alza de precios que ha tenido que enfrentar la población queda al descubierto el impacto que ha sufrido el salario en los últimos doce meses.

Al cierre de 2009, los alimentos y bebidas no alcohólicas acumulan un alza de 20,2% que representa un cambio importante respecto al 41,3% de 2008 y, gracias al peso que tiene este ítem en el cálculo final, el BCV logra el descenso que, sin embargo, mantiene a Venezuela con el mayor incremento de precios en América Latina.

El resto de las necesidades básicas no corre con la misma suerte. El costo de los alquileres de vivienda aumenta 15,6% versus 10,4% en 2008; los bienes que sirven para equipar el hogar se encarecen 33,3% versus 29,5%; el rubro de salud prácticamente no varía y experimenta un alza de 28,8% versus 28,4%; transporte aumenta 32,7% versus 32,6%; vestido y calzado desciende mínimamente con un salto de 18,1% versus 19%. Analistas consideran que si el consumo continúa contrayéndose será difícil que la economía, sumergida en recesión, tome oxígeno. En el cuarto trimestre de 2009 las ventas del comercio registran un descenso de 13%.

Cuestionan discriminación del racionamiento hacia las regiones

La Mesa de la Unidad Democrática denunció la "pésima administración del presidente Chávez" en el manejo del servicio eléctrico y señaló que el resultado de tal gerencia limita las actividades cotidianas de los venezolanos por lo que solicitará iniciar las averiguaciones correspondientes para determinar las responsabilidades administrativas. Los integrantes de la mesa exigieron al Gobierno un nuevo plan de racionamiento acordado con los ciudadanos, alcaldías y gobernaciones "con suficiente tiempo y preparación". "Esta irresponsable gerencia ocasiona que hoy en día los venezolanos y venezolanas vean afectadas sus vidas ante la implementación de racionamientos improvisados que dañan sus equipos y limitan sus actividades cotidianas", señala un documento difundido por la Mesa de la Unidad el día de ayer.

De acuerdo con el texto la expresión más grave "de esta pésima gerencia" ha sido el programa de racionamiento, "el cual ha tenido múltiples fallas de planificación. La consecuencia ha sido el caos en la ciudad de Caracas, y la persistencia de profundo malestar en el país". Los integrantes de la Mesa de la Unidad cuestionaron "la discriminación" que se ha hecho en los estados del interior del país con respecto a Caracas en cuanto a las medidas del Ejecutivo. Se destaca como ejemplo que en el estado Barinas los apagones se han presentado desde hace aproximadamente un año. Pero que desde hace dos meses los apagones son diarios y de una duración mínima de 2 horas y media, y sin previo aviso. En el documento se señala que tales cortes "se dan en forma indiscriminada y los usuarios no saben a qué hora les tocará quedarse sin electricidad". Igual ocurre con comunidades de Delta Amacuro "que pasan hasta 2 meses sin electricidad".

A juicio de la Mesa de la Unidad, esta "discriminación" debe cesar. "Exigimos al presidente de la República que suspenda inmediatamente el racionamiento discriminatorio y desconsiderado al que se tiene sometido al resto de los estados del país". Según el texto "la crisis del sector eléctrico nacional es resultado de la incompetencia de la administración del presidente Chávez manifestada en fallos garrafales en la planificación e inversión en el sector, además de una pésima gestión general". Los miembros de la Mesa de la Unidad cuestionaron que en la última década la demanda promedio del sector ha venido creciendo constantemente entre 3,5 y 4% interanual. Actualmente la demanda máxima del sistema se ubica por encima de 17.000 Mw en horas y días pico y "a pesar de conocer estas tendencias, el Gobierno no anticipó ni aplicó los correctivos necesarios para satisfacer las necesidades de la demanda".

Además criticaron que a pesar de que la capacidad instalada de generación del Sistema Eléctrico Nacional es de aproximadamente 23.000 Mw solo 17.000 Mw están en capacidad operativa. Actualmente 70% o más de la demanda está siendo satisfecha por generación hidroeléctrica. "Esta circunstancia no justifica las actuales limitaciones, pues países de la región, como Brasil y Colombia, no han sometido a su población a racionamiento permanente". La Mesa de la Unidad propuso que mientras dure la crisis se adelante una hora a la hora legal para aprovechar mejor la luz solar y anunció que una de las prioridades de los parlamentarios electos para la AN será supervisar la gestión del Gobierno en el sector eléctrico.


(Noticias tomadas de El Universal)


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