Exponen casos de persecución en Venezuela
CASTO OCANDO
Una docena de estudiantes venezolanos iniciará este jueves una visita a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en Washington, para exponer los casos de persecusión de estudiantes por razones políticas enVenezuela. El grupo incluye estudiantes que han sido encarcelados por orden de la Fiscalía General de Venezuela,, por participar en protestas callejeras contra diversas medidasoficiales. ``El objetivo de nuestro viaje es reunirnos con Santiago Cantón (presidente de la CIDH) para exponerle los casos de criminalizacion política de los jóvenes venezolanos'', dijo a El Nuevo Herald Sara Hannag, estudiante de Odontología de la Universidad de Carabobo, que integra la misión estudiantil. Entre los universitarios viajará Julio César Rivas, universitario de 22 años recientemente liberado de la cárcel luego de una huelga de hambre protagonizada por cientos de estudiantes en Caracas, que exigieron al gobierno su liberación de una cárcel de alta peligrosidad. Rivas estuvo encarcelado por casi tres semanas por su participación en protestas estudiantiles contra la Ley de Educación en agosto pasado. Luego de su liberación, Rivas encabezó una iniciativa que comenzó la semana pasada para recolectar un millión de firmas en todo el país para apoyar una petición de investigación a la CIDH; recoger otras 20,000 para respaldar un proyecto de Ley de Aministía Nacional ante la Asamblea Nacional con el objetivo de liberar presos y perseguidos políticos, y elaborar una exhaustiva base de datos sobre violaciones a los derechos humanos en Venezuela.
El narcotráfico y el crimen organizado no conocen fronteras en Latinoamérica
Desde décadas atrás se ha venido discutiendo sobre las consecuencias de flagelos como el narcotráfico, el terrorismo y el crimen organizado y sus nefastas implicaciones en los territorios que opera. En la actualidad, donde gran parte de la aldea global ha unificado criterios en torno a los derechos fundamentales del ser humano y de manera casi unánime se condenan las acciones terroristas, especialmente las que atentan indistintamente sobre sectores civiles (incluidos los menores de edad), las guerrillas, sean de montaña o urbanas, han ido perdiendo peso político, especialmente en los países de primer orden mundial.
Pero en Venezuela, por el contrario, Hugo Chávez y sus portavoces se empeñan en mirar como “camaradas revolucionarios” a grupos narcoguerrilleros como las FARC y el ELN de Colombia. Chávez ha desestimado una vez más las críticas de quienes adversan su ideología política, mientras concentra sus esfuerzos en atacar al gobierno colombiano de Álvaro Uribe, por estar supuestamente enviando espías de su central de inteligencia (la DAS), acusándolo de estar al servicio del “imperio” en clara alusión a Estados Unidos. Entre tanto en el país norteamericano, varios políticos han formalizado sus críticas a la llamada “Revolución Socialista del Siglo XXI” presentando a Barack Obama, una resolución para que declare a Venezuela como un país peligroso que patrocina el terrorismo.
Julià
Julià D Guillamon
Lurdes R. Basolí llegó por primera vez a Caracas en diciembre del 2007 para hacer las fotos de un reportaje sobre la revolución que se publicó en El País Semanal. Meses más tarde estaba yo buscando fotos antiguas de Venezuela, no había manera de contactar con el Archivo Fotográfico Shell, vi una de sus fotos y se me ocurrió que podía incorporarla a mi trabajo. Era una imagen tomada desde un coche. A través del parabrisas se veía una calle oscura, que ascendía en pendiente. En las paredes y en una caja metálica se leía, con una N adornada, la palabra No. En la calzada había un corte y el coche parecía andar sobre un raíl, cargando hacia la izquierda para tomar la curva a más velocidad. Finalmente encontré en el archivo Hulton una foto de un urbano que dirigía el tráfico con botas de caña alta y correajes, entre coches de lujo y carteles luminosos que decían Farmacia Catedral, Niños, Ultra, Trajes americanos. Entre estas dos imágenes habían transcurrido cincuenta años y Caracas se había convertido en la ciudad más violenta del mundo.
En la terraza del bar Estudiantil hojeamos el libro Inseguridad y violencia enVenezuela: 14.000 asesinatos en el 2008, una tasa de 50 homicidios por cada cien mil habitantes que en Caracas asciende hasta 130, frente a los 18 o 20 de México y Brasil. Cuando empezó a trabajar por su cuenta en los barrios de Petare y en la Cota 905, Lurdes utilizaba el lenguaje clásico del fotoperiodismo. Representaba el dolor mediante una composición de grupo: los familiares gritando en torno a un cadáver cubierto con una sábana. Mostraba la indiferencia ante la muerte con la comitiva de un entierro. El ataúd entra por uno de los lados, desde el otro extremo un chico lanza una pelota. Durante un breve instante pelota y ataúd se cruzan. En sus últimas fotos retrata a la gente en sus casas y sólo una cicatriz en el rostro o una mirada sombría recuerdan la violencia. Desde el 2007 Lurdes R. Basolí ha estado seis veces en Caracas: estancias de un mes y medio o dos meses, de las que volvía mentalmente exhausta. En el último viaje estuvo conviviendo con cuatro chavales de entre los 14 y los 18. Un día les preguntó cómo se veían dentro de cuatro años. Tres de los chavales dijeron: “muertos”. El cuarto piensa vivir porque le han prometido que saldrá en una película de la serie Azotes de barrio.
Llegó a Barcelona dispuesta a abandonar un proyecto que sólo le creaba frustración. Pero tras unos meses ya piensa en regresar y ver a sus amigos. Tomar su camionetica y subir por las escarpadas laderas hasta donde viven Darling, que perdió a su padre y a su hermano, o Mayra, una chica que fue Reina del Barrio y a quien hace 19 años un pretendiente le pegó un tiro en la cabeza. Desde hoy las fotografías de Lurdes, Caracas: la sucursal del cielo, pueden verse en la exposición FotoPres'09 en CaixaForum.
ABC
Chávez confirma la detención de dos «espías» colombiano
El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha confirmado la detención enVenezuela de "dos funcionarios" del Departamento Administrativo de Seguridad de Colombia (DAS) por hacer "espionaje". El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha confirmado la detención enVenezuela de "dos funcionarios" del Departamento Administrativo de Seguridad de Colombia (DAS) por hacer "espionaje". El mandatario ha explicado que la presencia de espías colombianos en Venezuela se debe a una "conspiración auspiciada por el Gobierno de Estados Unidos". Sin ofrecer detalles, el vicecanciller venezolano para América Latina y el Caribe, Francisco Arias Cárdenas, ha indicado que en las "próximas horas" el Ministerio del Interior revelará las "pruebas" de las actividades de presunto espionaje de los agentes colombianos, quienes, añade, tendrán que afrontar procesos en "los tribunales venezolanos". Horas después de este anuncio, ninguna otra autoridad venezolana se ha pronunciado sobre el caso, ni se han dado a conocer más detalles. En sus declaraciones a la prensa, Arias Cárdenas ha desvinculado el supuesto espionaje con la matanza la semana pasada de ocho colombianos que, junto a otras cuatro personas, habían sido secuestrados el 11 de octubre por grupos armados no identificados cuando jugaban fútbol en el estado de Táchira, fronterizo con Colombia.
Cemex abierta a volver a negociar directamente con Chávez la nacionalización
La mexicana Cemex, la tercera cementera del mundo por su capacidad de producción, está abierta a discutir una salida negociada a la expropiación de sus plantas por parte del Gobierno venezolano al margen del proceso legal que ha entablado en lo tribunales internacionales, informó hoy la empresa.
''Iniciamos un proceso de arbitraje en una corte internacional, sin embargo, mantenemos nuestra actitud ante el Gobierno para negociar fuera del proceso de arbitraje'', dijo en conferencia de prensa Héctor Medina, vicepresidente ejecutivo de Finanzas de la firma en Monterrey (norte de México). En diciembre de 2008, Cemex presentó una demanda de arbitraje ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI), dependiente del Banco Mundial, litigio que puede durar varios años. Cemex, la mayor cementera en Venezuela, exige un pago por alrededor de 1.300 millones de dólares de compensación por los activos nacionalizados por el presidente Hugo Chávez, mediante un decreto promulgado a mediados del año pasado, que afectó también a otras dos firmas extranjeras.
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