sábado, 12 de diciembre de 2009


INGRESOS DE VENEZUELA EN RIESGO POR FALLAS EN FAJA DEL ORINOCO

REUTERS

Las cada vez más frecuentes paradas en los mejoradores venezolanos de la vasta Faja Petrolífera del Orinoco están poniendo en riesgo los vitales ingresos petroleros de la nación sudamericana, que ya está viendo declinar sus exportaciones de crudo.

La actividad petrolera de la nación se desplomó un 9,5 por ciento en el tercer trimestre del 2009, tras caer en los dos trimestres previos, y el valor de las exportaciones de crudo y derivados se redujo a la mitad por la caída de los precios y la aplicación de los recortes acordados por la OPEP.

“Si hay problemas en los mejoradores y en refinación, Venezuela podría no capitalizar el incremento eventual de los precios del petróleo en 2010″, dijo Luisa Palacios de Medley Global Advisors en Nueva York.

El Gobierno nacionalizó en 2007 los cuatro proyectos del Orinoco, dejando una estela de arbitrajes internacionales, y desde entonces la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) administra cinco empresas mixtas en esa región y otras 21 que reemplazaron a los llamados convenios operativos.

Al ser la socia mayoritaria, PDVSA controla la directiva de compañías y lidera buena parte de los procesos operacionales y laborales de estos proyectos, que tratan el crudo extrapesado para que pueda ingresar a refinerías convencionales.

“Se percibe un desempeño negativo. Aunque toda transición es compleja, la lección de los convenios operativos no llevó a la reflexión, a un manejo más cuidadoso de las operaciones”, dijo Francisco Monaldi, del Instituto de Estudios Superiores en Administración en Caracas.

De los 189.000 barriles por día (bpd) que Venezuela recortó en enero bajo los acuerdos de la OPEP, en la Faja se ejecutó 64 por ciento, obligando a mejoradores como el de Petromonagas, donde participa la inglesa BP a detener sus operaciones completamente durante varios meses.

FALTA DE MANTENIMIENTO

Pese a que en agosto Venezuela revirtió el recorte en la Faja, la cadena de incidentes, paradas no programadas y reclamos laborales que se han producido desde entonces, han impedido a los mejoradores mantenerse en su máxima capacidad conjunta de 620.000 bpd.

La Agencia Internacional de Energía reportó esta semana una producción en la Faja de 460.000 bpd en noviembre, un 4,1 por ciento menos que septiembre, pero PDVSA no avala estas cifras.

Ni PDVSA ni los proyectos han difundido cifras públicas sobre el nivel actual de las exportaciones conjuntas.

“Hicimos una inspección en el mejorador de Petrocedeño y lo digo con responsabilidad: peligra la vida de los trabajadores. Está colapsado y destruido”, dijo Eudis Girot, un líder sindical oficialista.

Fuentes de tres de las cuatro compañías privadas que participan en estos mejoradores coincidieron en señalar la falta de mantenimiento preventivo como la principal causa de los tropiezos operacionales de las plantas.

También dijeron que la centralización en PDVSA de toda la labor de procura de equipos, materiales y personal para estos proyectos retrasa la labor de refacción y reemplazo de piezas.

CADENA DE PROBLEMAS

En octubre y con un año de retraso se ejecutó la primera parada mayor programada del mejorador de 180.000 bpd de Petropiar, operado por PDVSA y Chevron.

Aunque esta parada se completó a fines de noviembre como se había calculado, otros proyectos de la Faja no han tenido la misma suerte.

Estando aún Petropiar detenido, en noviembre se pararon simultáneamente por problemas en sus calderas los mejoradores de 130.000 bpd de Petroanzoátegui, administrado completamente por PDVSA, y el de 165.000 bpd de Petrocedeño, donde participan la noruega Statoil y la francesa Total .

Mientras técnicos de las empresas mixtas admiten desde el anonimato que han tenido que aplicar “medidas poco ortodoxas” para mantener a flote los mejoradores, lo cual podría estar jugando ahora en su contra, PDVSA afirma que “las fallas obedecen a problemas de diseño”.

En un comunicado, la estatal aseguró el martes que en Petrocedeño se detectó “un nivel considerable de obsolescencia y fatiga en esos equipos por no haberse realizado los mantenimientos por parte de la antigua operadora Sincor”.

PDVSA informó también que el mejorador de Petrocedeño entró en fase de “pre arranque” días después de lo planeado, mientras que fuentes de Petroanzoátegui dijeron que todavía no hay una fecha para reiniciar ese proyecto, afectado además por fallas constantes en el despacho de sólidos.

Analistas dicen que el proceso de “aprendizaje” de PDVSA con los mejoradores tiene que resolverse antes de la reapertura de la Faja al capital extranjero con el Proyecto Carabobo, con un potencial de extraer 1,2 millones de bpd, en una licitación que ha sido demorada desde que se lanzó en 2008.

Por Marianna PárragA

reuters

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