EDUARDO FERNANDEZ
Toca hoy abordar el cuarto aspecto de la pentacrisis: la crisis cultural.
Durante muchos años, los venezolanos hemos vivido bajo el imperio de la cultura rentista petrolera.
Los países que prosperan son aquellos en los que los ciudadanos mantienen al Estado. Los países atrasados son aquellos en los que el Estado mantiene a los ciudadanos.
Obviamente, Venezuela pertenece a ese segundo grupo. El fundamento de la cultura rentista petrolera es el siguiente: gracias a Dios o a la diosa fortuna yo nací venezolano, es decir, ciudadano de un país rico, que tiene petróleo. El Estado administra la riqueza de todos los venezolanos y, por tanto, debe ocuparse de mi bienestar.
El Estado debe mantenerme desde la cuna hasta la tumba. De allí nace uno de los elementos que tipifica a la cultura rentista petrolera: el estatismo.
La solución está en sustituir la cultura del rentismo petrolero y de la dependencia por una cultura de la responsabilidad y de la iniciativa particular de los ciudadanos. Una cultura en la que quede claro que el Estado existe para los ciudadanos y no los ciudadanos para el Estado.
El modelo rentista petrolero ha consolidado elementos negativos de la cultura tradicional venezolana, como el caudillismo, el mesianismo, el militarismo y el centralismo. Pero, al mismo tiempo, ha introducido nuevas variables viciosas, como el estatismo, el presidencialismo exacerbado, el burocratismo y la hipertrofia del partidismo político.
Allí está la lista de los vicios culturales que tenemos que superar. Son 10: estatismo, centralismo, presidencialismo, caudillismo, mesianismo, militarismo, clientelismo, burocratismo, partidocracia y confrontación.
La solución está en sustituir la cultura propia del modelo rentista petrolero por una lista de valores positivos. Esos valores son: responsabilidad ciudadana, patriotismo, capacitación, civismo, espíritu empresarial, espíritu de cooperación, civilismo, regionalización y municipalización del poder, rectitud y honestidad.
Hay que tener conciencia de que cada uno de los elementos de la pentacrisis condiciona la solución de los otros cuatro. Para resolver el problema político, o el problema económico o el problema social que hemos comentado en nuestros anteriores artículos, hay que resolver el problema cultural.
Todos se influyen entre sí. La solución de cada uno depende de la solución de los otros cuatros. Seguiremos conversando.
Eduardo Fernández
@efernandezve
No hay comentarios:
Publicar un comentario