sábado, 14 de enero de 2017

LA OPINION DE POMPEYO

Resultado de imagen para pompeyo marquez


El Papa, la tiranía y el miedo

“Ninguna tiranía se sostiene sin explotar nuestros miedos.”
Papa Francisco
 
En noviembre de 2016 se realizó en Roma un Encuentro Mundial de los Movimientos Populares que clausuró el Papa Francisco con un discurso que resalta que toda tiranía explota nuestros miedos, al cual se le alimenta. Como parte del evento se estableció el eje “Pueblo y Democracia” ya que la democracia es diálogo, convivencia pacífica y paz.
Las palabras del Papa no pueden ser más elocuentes. Uno de los factores que mantienen en el poder las dictaduras es aplicar la represión con miras a paralizar las protestas populares. Más como lo dijo el Papa Francisco ese miedo debe romperse. La represión tiene rostro de torturas, de masacres como las de Cariaco y Barlovento, de mantener más de un centenar de presos políticos que en los acuerdos de la segunda reunión del llamado “diálogo” se comprometió a liberar.
El discurso del Papa entra en sintonía con el pronunciado por Monseñor Padrón en la recién instalada Asamblea de la Conferencia Episcopal Venezolana de la cual es presidente, donde pone de relieve el carácter dictatorial del actual gobierno y sus últimas ejecutorias, entre las cuales resalta el caos en que amanece Venezuela en este año 2017. “En la historia del país ningún Gobierno había hecho sufrir tanto, por acción y omisión, al pueblo como el que ahora administra las funciones”, dijo ante los obispos.
Al negarse el régimen a respetar los derechos constitucionales entre ellos el del voto y el revocatorio, sume al país en la violencia y el enfrentamiento entre venezolanos. Quisiéramos aprovechar este instante para recordar las provocadoras palabras de quien gobierna al margen de la Constitución y quien fue sancionado por la Asamblea Nacional presidida ahora por Julio Borges, Secretario General de Primero Justicia, porque abandono del cargo es actuar violando la Constitución, no basta con asistir al despacho y viajar en el avión presidencial a Cuba.
Dijo Maduro que ni con balas no con votos la oposición llegará a Miraflores, ratificando que esta “revolución” de pacotilla, descaradamente declara sus pretensiones de perpetuarse en el poder a como de lugar según propias expresiones, exhibiendo así su carácter autocrático cuando enfatizó que hace lo hace “porque le da la gana”.
Venezuela saldrá de esta profunda crisis que tiene el rostro del hambre y de los numerosos sufrimientos de su pueblo. Y así lo demostrará el 23 de enero. ¡Sí se puede!

El saldo está en rojo
El Papa Francisco expresó recientemente que las tiranías se sostienen explotando nuestros miedos. Pues bien Venezuela perdió el miedo en diciembre del 2015 cuando le infringe al régimen chavomadurista una derrota que coloca a un poder del Estado, la Asamblea Nacional, en manos de la oposición, independientemente de las barrabasadas de una corte sumisa a Miraflores, transitorias e anticonstitucionales, que anula en la práctica el papel fundamental que el parlamento desempeña. El gobierno de Maduro se tambalea y más de un 80% de los consultados repudian el régimen.
En la Venezuela de la mitad del siglo XX Simón Alberto Consalvi escribió el libro “1957: el año en que los venezolanos perdimos el miedo”, y nos enfrentamos 10 años a la tiranía. Al perder el miedo entramos en un combate que condujo a la huída del dictador, al derrocamiento del régimen dictatorial y a la apertura de gobiernos democráticos que se sucedieron 40 años.
Debemos leer con atención las palabras del Papa y la posición enérgica y corajuda de la Conferencia Episcopal que congrega los obispos venezolanos: “El saldo está en rojo en todos los rubros”, dijo monseñor Padrón, quien sustentó su afirmación con el siguiente balance: “Más de 29.000 muertes violentas, hambre y falta de comida que solo producen agonía y desnutrición, desabastecimiento de medicinas que provocan decesos y reaparición de epidemias; más de 120 presos políticos injusta e ilegalmente privados de libertad, la corrupción generalizada, el ataque sistémico a la empresa no oficial y a los medios de comunicación independientes; la inconsulta, violenta e inconstitucional ideologización de la educación; los intentos de anular a la AN; el cierre del camino electoral; la crisis financiera y últimamente la confusión e improvisación con el uso y desuso de la moneda de mayor valor que creó gran angustia en la población”.
Hemos dicho que lo peor que le puede suceder a Venezuela es retroceder al siglo XIX, a las guerras civiles, a la represión como método de gobierno. Un país en el siglo XXI no puede ser gobernado con la ley de la selva. Venezuela conquistará la democracia. Los tiempos de la tiranía en plena revolución tecnológica tiene sus días contados, como ratifica M. Naim en su libro “El fin del poder”.
Venezuela saldrá de esta profunda crisis que tiene el rostro del hambre y de los numerosos sufrimientos de su pueblo que tendrán que llegar a su fin. La unidad será reconstituida y un gobierno de transición y unidad nacional hará que nuestra patria regrese a la civilización.
Un saludo a todos los presos y perseguidos políticos de parte de quien cercano a sus 95 años, tiene ocho años de prisión y doce de clandestinidad. Exigiremos una vez más su libertad este 23 de enero en la calle.

No hay comentarios:

Publicar un comentario