miércoles, 19 de noviembre de 2014

DIFICULTADES UNITARIAS


  Ricardo Ríos

A despecho de JV Rangel, con Chúo la MUD ha revitalizado el debate en pro de la unidad, dándole cauce a la ruda lucha por el liderazgo que casi la disolvió en meses reciente. Lo mejor es que hay manifiesta voluntad unitaria, pero hay temas a abordar.
No es simple combinar la natural necesidad de consolidación y expansión de los partidos con el diseño de una estrategia convergente orientada hacia la toma del poder. Tampoco lo es crear un ambiente de convivencia y libre acción con al menos 5 personas trabajando duro por ser el abanderado de los sectores democráticos contra esta avalancha de torpezas que disuelve al país.
La firmeza y la consistencia en el discurso son requisitos insustituibles que se le exigen a cualquier aspirante a ser líder, tanto como lo es la humildad que les permite enmendar y corregir. Ésta ha estado ausente en muchos casos, centrando las consignas en expresiones egocéntricas que afectan severamente las posibilidades de crear consensos. Vente, en lugar de vamos juntos; Liberen a Venezuela con una foto del famoso preso o el tiempo de Dios es perfecto porque yo soy el candidato, son expresiones inconvenientes que consolidan sectas de fieles pero no atraen al imprescindible "otro país" que hace falta para ganar.
Lo inmediato es salir muy bien en las venideras parlamentarias. Los esfuerzos hacia una Asamblea Constituyente no veo que sumen a ese proyecto, sus promotores quieren entrar y ampliar su representación en la AN, poniendo las cosas en las puertas de decisiones cismáticas, ojalá que no. Lo que pasó en la FCU-ULA no fue un episodio clásico de fracciones juveniles de oposición compitiendo entre ellas porque el PSUV es demasiado débil y se privilegia el debate local a la estrategia unitaria nacional. En la ULA hubo hechos que nos dicen que, al margen de las sempiternas acciones vandálicas del oficialismo, la tentación de destrozarnos antes que unirnos toma cuerpo.
Una lectura acomodaticia del concepto de "los más grandes" en la dirección de la MUD ha dado pie al nacimiento de propuestas y acciones que ponen en tela de juicio la dirección de la misma, muchas veces a través de miserables campañas irresponsables por las redes sociales, pero que tienen eco en cierta prepotencia y sectarismo en la conducción de la Mesa.
Movimientos disolventes aparecen en concordancia con la estrategia chavista de crear un fulano nuevo centro político, pensado como receptor de los votos que sancionarán el fracaso de Maduro. Esto ha alborotado pasiones y ambiciones, muchas legítimas, que nos obligan a diseñar políticas inclusivas de respeto y hasta de promoción de componentes de la Unidad que aportan más ideas que votos, respetando a los que sacan más votos. Difícil tarea de impostergable ejecución para que todos ganemos, el reto es tan grande que provoca refugiarse en el facilismo fratricida. Yo apuesto al superior esfuerzo unitario que está impulsando Chúo. Vamos todos que hay tiempo para liberar a Venezuela. @rricardorios1

No hay comentarios:

Publicar un comentario