Advierten que con "protestas difusas" no se logran cambios
JAVIER MORENO SUCRE
Los espacios del Aula Magna de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) sirvieron para que académicos y estudiosos de la conflictividad social concluyeran que "las protestas que se escenifican en el país necesitan ser reorientadas si en realidad se quiere dar un vuelco al sistema de vida de todos los venezolanos".
Luis Vicente León, director de Datanalisis, y panelista del foro "Balance y valoración de la protesta" aseveró durante su ponencia que si bien es cierto que el 62% de la población considera que la situación del país es inestable; también es cierto que más del 60% de la población rechaza las barricadas y las acciones violentas.
"Si las personas que organizan protestas por la situación de crisis que se vive en Venezuela no encuentran un camino que les permita hacerse sentir y, que además involucre a los seguidores del oficialismo; lo que van a lograr es sembrar un cansancio colectivo que no arrojará nada positivo, sino más bien desaliento", dijo.
Ajuicio de León, el aluvión de manifestaciones desdibujó la figura del presidente de la República Nicolás Maduro en el contexto nacional e internacional, lo que tampoco fue catapultado por un liderazgo opositor que aun no se ha conectado con las carencias que sufren todos los ciudadanos por igual.
"Con toda la convulsión social que se vive día tras días el Gobierno perdió hasta 12 puntos en sus niveles de aceptación popular. Similar derrota vivió la oposición durante ese periodo que por falta de pericia y estrategia no recogió algunos de los puntos del descenso gubernamental", agregó.
El director de Datanalisis criticó la conversión de manifestaciones de índole pacífico por encuentros violentos.
"Al evitar una protesta pacífica eres el responsable de una manifestación violenta. Allí el Gobierno no ha sabido manejar sus argumentos", acotó.
Por su parte, Luis Pedro España, Sociólogo y profesor de la UCAB, cuantificó el número de fallecidos y los logros políticos y sociales de las manifestaciones. "Hasta la fecha van 28 personas fallecidas y otros miles fueron detenidos mientras que Nicolás Maduro sigue en mandando en el Palacio de Miraflores. Razones para protestar sobran, son cientas, pero deben organizarse en encuentros específicos, con ideas claras y con un rumbo definido. La protesta difusa es insuficiente para lograr los cambios que la sociedad necesita", insistió.
España criticó que para muchos líderes políticos de las tendencias en disputa, la protesta radical es la más fácil porque es la que resulta popular.
"Las tendencias políticas cambian de la noche a la mañana y en eso se debe trabajar. El Gobierno en sí sabe que debe tender puentes para poder obtener un clima de gobernabilidad que le es esquivo en esta época. Militarizar la Plaza Altamira es un error político que no dejará resultados alentadores para la gestión del Gobierno; más bien refleja su debilidad", concluyó.
Benigno Alarcón, quien también forma parte del staff de docentes de la UCAB, denunció que en el país se ha instalado judicialmente un sistema "ojo por ojo, diente por diente" en contra de la disidencia".
"Desde hace más de un mes se está ejecutando un paquete oficial de ajustes de cuentas políticas. El Gobierno emplea un autoritarismo híbrido que no reconoce a su contendor y a sus propias bases populares que igualmente están descontentas", afirmó Alarcón.
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