¿POR QUE ARUBA ARRUGÓ?
ADOLFO SALGUEIRO
Los acontecimientos se desarrollaron en forma tan sorpresiva que cuando estábamos pensando en analizar el caso de la detención del general Carvajal nos encontramos desentrañando los intríngulis de su liberación y regreso triunfal al Teatro Teresa Carreño. Cuando estas líneas vean su publicación vaya Dios a saber que sorpresas hayan transcurrido.
Quien esto escribe no tiene prueba alguna para condenar al general. Tampoco tenemos prueba para descalificar las investigaciones de gobiernos extranjeros que en forma coincidente se transforman en los indicios que pudieron haber dado lugar al proceso que culminó en la detención.
Es natural que el gobierno de Venezuela reclame para sí el desenlace de esta notable historia como una victoria en la que la revolución justiciera triunfa sobre la conspiración internacional política y mediática de las potencias del mal. Sin embargo el caso tiene otras aristas que vale la pena explorar.
Nos preguntamos como es que la Cancillería no entendió la muy clara y ampliamente practicada señal de que Holanda luego de seis meses sin respuesta al requerimiento venezolano de acreditación, rechazaba recibir al cónsul designado . Experiencia suficiente y en su propia persona tiene el Canciller Jaua cuyo placet para ser acreditado como embajador de Venezuela ante Argentina fue respondido con la demora y el silencio que obligaron a nuestra Cancillería a proponer a otra persona. Lo que no parecen tomar en cuenta los comunicados venezolanos es que Carvajal fue declarado “persona non grata” en Aruba y mas nunca podrá regresar.
Luego nos preguntamos por que el señor Carvajal, quien presumía o suponía alguna inmunidad, se presenta en Aruba con un pasaporte ordinario –entendemos que a nombre de otra persona- No hubiera sido lógico que exhibiera su identidad y condición consular? O es que no puede quitarse de la cabeza el secretismo y las operaciones encubiertas propias de su condición de ex-jefe de los servicios secretos venezolanos?
Extraña asimismo el hecho de que una cosa tan requetesabida como es la cuestión de las inmunidades y privilegios de los Cónsules (distintas y menores que las de los diplomáticos) haya sido interpretada en forma negativa en Aruba (conforme a derecho según opinión de este columnista con cuarenta años como titular de una cátedra de Derecho Internacional Público) y a los dos días reversada por la cancillería holandesa en La Haya. Tal
En esta misma página, en fecha 9 de noviembre pasado este columnista criticó y calificó como imprudente la visita (brevísima sí) de los reyes de Holanda a nuestro país alertándolos que temprano o tarde tendrían que lamentar su mal juicio cuando los intereses económicos o políticos de su país con el nuestro se contrapusieran. Yo te lo dije Su Majestad Real !
Por último hay una enseñanza que los personeros cercanos al actual poder y a sus mieles deberían reflexionar. ¿A donde van a ir a gozar sus riquezas o pasar sus penurias el día que la rumba se acabe?
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