Desde Fedecámaras se afirma que un eventual racionamiento eléctrico impediría la reactivación del sector manufacturero. De acuerdo a las encuestas de coyuntura realizadas por Conindustria, tres de cada cuatro empresarios consultados señalaron que el racionamiento eléctrico fue uno de los mayores obstáculos para elevar la producción.
A pesar que el Gobierno restó importancia a los efectos que tendría la crisis eléctrica en la economía nacional, un informe del BCV indica que “el advenimiento de la crisis eléctrica (…) y la necesidad de aplicar un programa de racionamiento, limitaron la capacidad de expansión del sector productivo e incidieron en la fase contractiva iniciada en 2009”. Uno de los principales defectos del Gobierno es que no sabe blindar sus mentiras. Cada vez que un vocero oficialista no jura y perjura que algo es de una manera, salta otro y nos dice todo lo contrario. Durante todo el 2010 el Gobierno nos dijo que el racionamiento eléctrico no afectaría la productividad, pero ahora sale el BCV y nos dice que sí la afectó.
Quizás lo más aconsejable para los intereses del Gobierno es que una persona se encargue de elegir las mentiras que se dirán cada día y se las pase por email a todos los involucrados para que se la aprendan y la internalicen, eliminando así todas estas contradicciones que, además de chocantes, atentan contra la imagen de la revolución… aunque en realidad, eso tampoco serviría de nada porque, a estas alturas de partido, todos sabemos que cuando el Gobierno dice algo hay que asumir que es todo lo contrario ¿O no?
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