EDUARDO FERNANDEZ
Para ganar las elecciones se necesitan cuatro cosas
fundamentales. En primer lugar, un mensaje atractivo. No basta con decir
que el Gobierno es muy malo. Eso ya lo tiene clarísimo el electorado y
lo reflejan todas las encuestas de opinión pública que se hacen en
nuestro país.
Además, lo malo que es el Gobierno lo sufrimos los ciudadanos todos los
días. Basta con mencionar el alto costo de la vida, el desabastecimiento
y la inseguridad. Son males que padecemos todos los venezolanos, todos
los días, y que no hace falta que nos los recuerde un discurso político
opositor. Cuando hablo de mensaje atractivo como un requisito básico para ganar
las elecciones, me refiero a la propuesta de futuro mejor que debe
encarnar el discurso alternativo. Una propuesta seria, creíble y capaz
de ilusionar y movilizar al electorado.
Una segunda condición necesaria para ganar las elecciones es una
organización eficiente. La alternativa debe contar con una organización
que permita transmitir el mensaje por toda la geografía nacional. No
solo por toda la geografía física, es decir, todos los estados,
municipios y parroquias. También por todos los estratos socioeconómicos
de la población, particularmente por los sectores D y E.
Un tercer elemento fundamental para ganar las elecciones es una
estrategia inteligente. Como lo expliqué en mi artículo anterior, la
estrategia del oficialismo se ha basado durante estos quinces años
largos en dividir a los venezolanos entre buenos y malos hijos de la
patria.
La estrategia que propongo es la de convocar a la unidad de los
venezolanos. Presentar un mensaje que represente una gran convocatoria a
la unidad nacional y diseñar una organización abierta a la
participación de todos los venezolanos sin distinción alguna.
Frente a la estrategia de la confrontación, de la exclusión y del
sectarismo, debe levantarse la estrategia de la convivencia, del respeto
y de la tolerancia. Creo que esta propuesta tendría más seguidores.
Finalmente, para ganar las elecciones se necesita presentar los mejores
candidatos. Algunos serán escogidos en las primarias, otros en los
llamados consensos. Yo hubiera preferido que todos hubieran sido
elegidos democráticamente. Ya la suerte está echada. Espero que no se
olviden de tomar en cuenta la participación femenina y la presencia
juvenil.
En resumen: mensaje atractivo, organización eficiente, estrategia inteligente y buenos candidatos.
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