Grupo La Colina

Coyuntura

20 de agosto 2009

Chávez prosigue su ofensiva con la aprobación a la “brava” de las leyes de Educación y de Tierras Urbana; aprovecha las vacaciones, desconoce la opinión de los sectores que las adversan, y sin la debida discusión que establece la Constitución. Paralelamente, el gobierno prosigue sus intentos de criminalizar la protesta, y para ello hace uso creciente de la violencia de la Policía y de la Guardia Nacional y de los grupos fascistas (por los métodos que emplean, similares a las camisas negras de Mussolini y los grupos nazis) patrocinados por el gobierno: UPV (Lina Ron), La Piedrita, Tupamaros, “empleados” de alcaldías oficialistas, de Vive TV y otros organismos públicos.

El cierre arbitrario de 34 estaciones de radio, la violencia absurda de un grupo oficialista contra los periodistas de la Cadena Capriles, y de la PM y GN contra los estudiantes y educadores, y la aprobación abrupta de la Ley Orgánica de Educación ha generado una fuerte condena de la sociedad democrática, en la cual han coincidido sectores tradicionalmente opositores con otros, que incluso han apoyado a Chávez.

¿Ahora o más tarde?

Chávez aprovecha el 2009, año no electoral, para impulsar leyes antidemocráticas y anticonstitucionales antes del 2010, en el cual tendrán lugar las elecciones parlamentarias y las municipales. Imponer más tarde estas nuevas leyes y acciones radicales tendría para el oficialismo un costo mayor, que podría incidir en los resultados electorales, como ocurrió con el cierre de RCTV.

¿Qué otras leyes y acciones podrían aprobarse o ejecutarse aprovechando este período sin elecciones? ¿La Ley de Propiedad Social? ¿Las leyes especiales y reglamentos previstos en la recién aprobada Ley Orgánica de Educación? ¿El cierre de Globovisión, y de las otras 200 estaciones de radio amenazadas? Si el período vacacional, ha estado lleno de protestas laborales, estudiantiles, de periodistas y trabajadores de la comunicación, en septiembre es previsible que este clima de rechazo se intensificará. ¿Aún en este contexto visiblemente conflictivo se atreverá el régimen a seguir cerrando medios de comunicación y cercenando las libertades democráticas? ¿A que costo?

El escenario electoral 2010

El escenario para el próximo año luce extremadamente importante para no hablar del tema. Hay sectores antipolítica, que no se cansan de proponer dejar de lado este tema, alegando la gravedad de la situación interna, y acusando de nuevo a los “políticos” de pensar sólo en cargos y posiciones. Estos sectores, o no le dan importancia a lo que nos jugamos en las elecciones parlamentarias 2010 o piensan que esta tarea puede ser enfrentada exitosamente sin mayor preparación, y a última hora.

Si para el gobierno mientras más temprano mejor, habría que prever entonces un escenario según el cual las elecciones parlamentarias podrían ser adelantadas, antes de fin de año 2010, distrayendo de paso los efectos crecientes de la crisis económica sobre la popularidad presidencial y del partido de gobierno.

¿Es posible que el oficialismo revierta las tendencias de persistente decrecimiento de su votación en el 2010? Claro que es posible. Pero ello dependerá también del comportamiento de las fuerzas democráticas; de si logra estructurar una unidad perfecta, y una propuesta nacional y regional, y capitalizar en votos el descontento creciente por la incapacidad del gobierno y la crisis económica.

Por el lado del oficialismo, está claro que el cierre de los medios de comunicación y la violencia contra comunicadores, estudiantes, y en general contra todos los que protesten va dirigido a crear, además de reducir medios de oposición a la prédica revolucionaria, un clima de violencia y polarización que incentive la autocensura, la inhibición y la abstención. Si a esto sumamos el acostumbrado ventajismo y uso abusivo de todos los recursos públicos a favor de los candidatos oficialistas, no hay que confiarse en las tendencias de decrecimiento de la votación oficialista y trabajar duro desde ahora para derrotarlo.

Abrogatorio a Ley Orgánica de Educación

Son muchas las reservas que suscita en la mayoría de los partidos políticos la convocatoria a un referéndum abrogatorio de la Ley Orgánica de Educación. Aparte de los argumentos jurídicos y la previsible actuación parcializada del CNE que pondría todos los obstáculos para su realización, abocarse a un abrogatorio debilitaría la necesaria concentración de las organizaciones políticas y de la sociedad civil en la preparación de las elecciones parlamentarias.

El camino más fructífero a largo plazo contra la Ley de Educación es el de masificar la discusión sobre esta ley; dar a conocer su contenido, sus peligros, sus potencialidades, y promover una resistencia de bajo perfil a su aplicación en las escuelas y en las comunidades. La Organización No Gubernamental Asamblea de Educación trabaja para preparar un manual para los docentes democráticos de cómo enfrentar los riesgos de esta ley sin poner en peligro la estabilidad de maestros y profesores ni el proceso educativo.

La tarea de imponer esta Ley (y otras leyes y tareas) para el régimen va a ser titánica dado su incapacidad para llevar a la práctica acciones masivas en todo el país; su falta de personas preparadas, el desorden administrativo y la falta de recursos. No olvidemos que esta guerra es a largo plazo.

MG/ Caracas, 20 de agosto de 2009.