RAMÓN GUILLERMO AVELEDO
Escasean las divisas, y por eso escasea la harina, desde la de maíz a la de trigo, o el papel, desde el periódico hasta el higiénico; también los medicamentos, y las partes de automóvil, y bueno, la verdad es que faltan muchas cosas.
El Gobierno explica que no hay suficientes dólares para la economía porque unos cuantos vivos se los cogieron. A esa explicación, para empezar, le falta una pieza clave, y es que los dólares los reparte el Gobierno, así que quienes se los cogieron fue porque el Gobierno se los dio. En realidad se los vendió. Así que mal pueden los que mandan andar señalando a los demás, cuando deberían empezar por una autocrítica, que es el primer paso de las rectificaciones. Y no nos engañemos, a Venezuela le urge que el Gobierno rectifique.
Pero no solo eso le está haciendo falta a la versión oficial de la escasez de divisas, precisamente cuando el país las ha recibido en una cantidad que no tiene precedentes en su historia. Por ejemplo, ¿cuántos miles de millones de dólares se nos van en pago de la deuda que el Gobierno ha multiplicado varias veces? ¿Cuántos miles de millones de dólares nos dejan de entrar porque mientras exportamos menos petróleo y derivados, y dejamos de cobrar por distintos convenios que en algunos casos son regalos mal disfrazados, tenemos además que desembolsar para importar gasolina de Estados Unidos? Por eso es que molesta tanto que sea precisamente el todopoderoso ministro-presidente de Pdvsa el que anuncie, en medio de repartición de regaños, lo que es una devaluación pobremente disimulada.
El país depende hoy más de las importaciones que en 1998. Entonces la situación distaba mucho de ser ideal, pero actualmente es mucho peor. La verdad es que producimos menos, todo como producto de políticas y medidas gubernamentales. Expropiaciones, acoso y amenazas, cargas fiscales y parafiscales, corrupción. Y por eso tenemos que importar más. Lo cual quiere decir que dólares que antes entraban ahora salen. ¿Cómo no van a faltar?
El principal importador es el Gobierno mismo pero, además, si una parte de las importaciones (como dice el Gobierno) se hizo fraudulentamente por “empresas de maletín”, esos tramposos consiguieron las divisas en Cadivi, que es del Gobierno, o en el Sicad, organizado por el BCV. Varias veces un gentío les ha pedido que muestren la lista de divisas autorizadas y liquidadas, y nada. ¿por qué el misterio? ¿A quién protegen? Así que por donde usted lo mire, la respuesta a la pregunta ¿dónde están los dólares? la tiene el Gobierno.
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