Leopoldo López
Este domingo la alternativa democrática ganó en municipios donde nunca antes se había ganado. Hubo conquistas importantísimas de espacios que estaban en manos del oficialismo y que hoy están en manos de la Unidad. Pueblos pequeños y ciudades grandes, desde Chaguaramas hasta Maturín y Barquisimeto. Felicitamos ese esfuerzo titánico de liderazgos, de equipos y familias enteras. Ahora, por supuesto, a nuestros alcaldes les toca hacer una excelente gestión.
Estamos convencidos que los venezolanos que quieren cambio son la mayoría, pero se enfrentaron a limitaciones impuestas desde la hegemonía del Estado para truncar la expresión de la voluntad popular. Por eso denunciamos la situación de ventajismo durante el comicio electoral por parte del gobierno nacional. Es indiscutible la manipulación del proceso a través del abuso de poder para favorecer a los candidatos oficialistas. Este 8D se limitaron los espacios de comunicación, estuvo presente la violencia contra la disidencia, la operación morrocoy en muchos de los centros impidió que venezolanos se expresaran. Estas y muchas más fueron las estrategias que utilizó el Ejecutivo, como nunca, para impedir que la mayoría se manifestara por el cambio.
Pero también debemos reflexionar y reconocer que fue un error no haber defendido con contundencia la mayoría expresada el 14 de abril. Teníamos que actuar en defensa de esos resultados porque los derechos de un pueblo no se negocian y eso influyó en la participación de este domingo. Hoy reivindicamos la lucha del pueblo venezolano, de la mayoría que quiere cambio y que no se expresó este 8D por errores como ese. Hoy asumimos desde Voluntad Popular el camino y los riesgos que implica defender esa mayoría y sabemos que así lo harán todos quienes hacen vida dentro de la Mesa de la Unidad y lideran la alternativa. La tesis que venimos impulsando, hoy cobra más vigencia: calle y voto debe ser la consigna para impulsar el cambio.
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