martes, 25 de enero de 2011

Todo se está cayendo

Elides Rojas

"Chávez está perdiendo popularidad. La tendencia es irreversible", señaló Ramón Guillermo Aveledo en días pasados. Y es un asunto serio, tan serio que tiene a micomandantepresidente en campaña presidencial, con candidatura lanzada, de frente cuando todavía faltan casi dos años para la medición electoral. Y lo que está ocurriendo no es culpa del imperio ni mucho menos de la oposición golpista, a quien más bien le critican cierta inacción en relación a los grandes problemas nacionales.


12 años de ineficiencia, 12 años de corrupción de mentiras y manipulaciones. 12 años entregando el país a cubanos, rusos, chinos, a los hermanos de Irán, nicaragüenses, bolivianos, ecuatorianos y todo aquel que a bien tenga pegarse una jaladita revolucionaria. 12 años de represión, persecución política, de abusos de poder y manejos interesados de la justicia. 12 años de quiebra lenta, pero sostenida de la economía de la nación, a pesar de haber contado con los mayores ingresos por concepto de petróleo en la historia. 12 años de televisión, cadenas, radio y mucha propaganda; pero una realidad contraria a lo que pregona en las interminables peroratas. 12 años de cúpulas y cupulitas cívico-militares con un excesivo y único poder sobre todos los ciudadanos. 12 años de trampas, de creación de alcabalas para generar corrupción y deterioro ciudadano. 12 años bombardeando a la empresa privada y a todo lo que huela a empresas productivas. 12 años con la confiscación de los exitosos en mente. 12 años dejando enriquecer a los más cercanos. 12 años destruyendo lo que costó muchísimos años a otros. 12 años barriendo con la institucionalidad del país. 12 años masacrando a Pdvsa y las empresas de Guayana, el verdadero eje económico del país. 12 años dinamitando a los productores del campo. 12 años dejándose manejar por Fidel Castro y su hermanito. 12 años destruyendo toda posibilidad de inversión extranjera a punta de decisiones ilegales e inconstitucionales. 12 años destruyendo la seguridad jurídica. 12 años mintiendo descaradamente sobre pobreza, empleo, construcción de viviendas, vialidad. 12 años entregándole el país a los malandros, asesinos, traficantes de drogas que han acabado con más de 150 mil vidas en lo que va de revolución chimba. 12 años apropiándose de lo ajeno y con ganar se seguir estafando a los venezolanos. 12 años buscando pleito dentro y fuera del país.


Todo esto se sabe. Nadie con este prontuario puede mantener alta su popularidad por mucho tiempo, salvo que el país en sí mismo esté habitado por una mayoría malandra y suicida. Creemos que no, al menos todavía no. El chavismo no ha podido instaurar su cultura en la mayoría y eso se verá en el futuro cercano.


Tan es así la peladera de Chávez, que entre cadenas y concentraciones pagadas y de poca asistencia, ya está rogando su permanencia en el poder. Así decía el domingo: déjeme un período más. En el 2018 me voy. Si eso ocurre mejor que ni se vaya. Aquí no quedará nada. Peor, antes de ese año ya estará todo barrido y entregado a los extranjeros. No quedará un sitio de trabajo disponible que no sea con Chávez como patrón. Y ya se sabe lo embustero e incumplido que es el señor con los trabajadores. Empresa que toman empresa que quiebra. Ya ni discuten los contratos colectivos.


Una cosa es segura. De aquí al 2012 estará peor. No hay aumento de precio de petróleo que valga. La destrucción y el entreguismo es de tan magnitud que ni esa mantequilla capitalista que recibe a diario alcanzará.


Contra la propaganda chavista, basta la realidad. Salga de su casa y observe. Todo se está cayendo. Incluso la popularidad del dictador.

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