Emilio Nouel V.
Cuando uno ve u oye las poco convincentes y hasta risibles
explicaciones de un supuesto intento de golpe de Estado presentadas por el par
de personajes cínico-siniestros que designó el gobierno para ello, estamos
obligados a hacer un análisis que va de lo político a lo psiquiátrico y
viceversa; ejercicio, en mi caso, ilegal, de dos respetables profesiones,
aunque en esta vida, a juro, hemos ido aprendiendo algo de ellas, sobre todo,
en tiempos tan confusos e inciertos.
¿Creen estos elementos, de verdad, que la mayoría
de los venezolanos somos unos imbéciles para tragarnos semejante fábula?
Según ellos, 6 o 7 tenienticos, sin tropa, ni aviones, ni
barcos, ni tanques, ni armas, pretendían tumbar al gobierno mediante unas acciones
de bombardeo de varios lugares estratégicos. En esa iniciativa estarían
supuestamente involucrados varios políticos y, por supuesto, a la “fiesta” no podía faltar el demoníaco
imperialismo norteamericano.
Este desgastado y ridículo libreto ya no lo compra nadie, si
acaso, unos cuantos obnubilados e ingenuos cogidos a lazo.
El cerebro de los G2 cubanos o el de los agentes de
“inteligencia” venezolana, se les debe haber secado después de haber urdido
tamaña historieta cómica llena de incongruencias, contradicciones y componentes
fantasiosos distantes de la realidad.
A la bufonada, se le vieron todas las costuras.
Quedó claro que se pretendía con ello desviar la mirada de lo
que estaba por ocurrir u ocurriendo: la gran devaluación del bolívar débil, el
gran mandarriazo a la maltrecha economía personal, un asalto inmisericorde a nuestros
bolsillos ya bien menguados. Que nos olvidáramos de los millardos de dólares
que estaban o están encaletados en el
banco suizo HSBC; de las denuncias del cartel de los soles, de los horrores de
“La Tumba” del SEBIN o de la incompetencia y la corrupción en todos las áreas
de gobierno.
Y no digo que no falte gente por ahí que desee dar un golpe
de Estado. ¡Claro que la hay! En eso le doy toda la razón al gobierno.
Pero tengo la íntima convicción, y no porque tenga alguna
información confidencial, ¡Líbreme Dios! , de que los golpistas están hoy en
las alturas del poder, muy cerca de los que salen a rasgarse las vestiduras
ahora, después de que ellos mismos se vanaglorian y celebran ese tipo de
conductas primitivas. ¿O es que acaso
Cabello no reivindicó el golpe del 4F de 1992 al tiempo que denunciaba el
supuesto intento de golpe de estos días?
¿Qué clase de desquiciamiento es ése? ¿Esquizofrenia? Con razón el potentado de El Furrial dice que
Chávez era el único que apaciguaba al locaje del PSUV, es decir, ellos mismos.
Los que están en el poder son los que tienen con qué dar un
golpe, disponen de las ganas y las armas,
y es esa su forma de hacer “política”.
Son ellos los que piensan y han actuado de esa manera bárbara
e incivilizada; es su modus operandi para zanjar sus diferencias. Entre ellos
están los que perpetraron y apoyaron los alzamientos del 92, un ala de
chavistas de siempre que ahora en su pelea a cuchillo con sus conmilitones,
quieren desplazar a la otra ala del gobierno.
De eso no me queda la menor duda. Ya lo hicieron una vez en
2002, y hoy son embajadores y ministros que se repartieron los cargos y el
botín.
Si no fuera así, no se podría entender la paranoia, la desesperación
del gobierno de buscar dentro y fuera del país apoyo contra la otra banda que los
amenaza.
Por supuesto, como sucede en estos casos, se acusa a terceros
para no dar la impresión de que están escindidos y enfrentados a muerte al interior
de sus propias filas. Vociferan: “El
imperialismo", Julio Borges y Antonio Ledezma, cuando se sabe que éstos no aupan estas barbaridades.
Luego salen corriendo a llamar a Unasur, a los de ALBA y tutti quanti para que los socorran. El inefable Samper parece que se comió el
cuento, o cínicamente lo avala, o quizás se hace el pendejo para no enemistarse
con uno de los que lo impulsó para el cargo que ostenta. Hasta a Obama le han
pedido cacao.
Puro cinismo, pura aberración siniestra, detrás de esta
denuncia, de esta farsa.
EMILIO NOUEL V.
@ENouelV
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